En estos momentos de crisis mundial, nos encontramos que a quien más afecta esta situación de crisis es a las pequeñas y medianas empresas. Las Pymes están pasando por grandes apuros para subsistir en el día a día y la crisis ha golpeado en su línea de flotación, que no es otra que la tesorería, la liquidez… en definitiva el circulante de la empresa, que disminuye a pasos agigantados y provoca que una empresa totalmente viable, se vea avocada al cierre por no poder pagar sus deudas más inmediatas. Tres son las principales causas y varias son las recetas que podemos utilizar para salir de esta situación.