La deuda, entendida como financiación externa, es uno de los principales instrumentos utilizados por las empresas en su devenir diario. Al contrario de lo que algunos piensan, el endeudamiento empresarial es positivo y, en la mayoría de los casos, necesario y deseable. Y entendemos el endeudamiento empresarial como la financiación externa obtenida para realizar una inversión productiva.
Obviamente, si una empresa puede funcionar sin financiación externa, mejor que mejor. Cuantos menos gastos fijos tenga la empresa, mejor. Pero no hay que tener miedo a endeudarse si con ese endeudamiento conseguimos mejorar nuestros resultados.