La morosidad, medida sobre la base de los efectos de comercio impagados, vuelve a repuntar en marzo, según los datos publicados por el INE. En marzo, 573.467 efectos se impagaron, un 4,30% más que en febrero y un 18% más que hace un año. El importe medio de estos efectos de comercio impagados ha vuelto a superar los 3.000 euros (3.016,74), lo que eleva el total de deudas no pagadas hasta los 1.730 millones de euros.
El importe total de los efectos que vencían en marzo era de 24.296 millones de euros, lo que implica una morosidad del 7,12%. De nuevo, la morosidad sube, ya que en febrero esta tasa era del 6,58%. Si lo miramos por número de efectos impagados, el porcentaje es algo menor al mes anterior, pero en mi opinión, es más significativo el importe, ya que ese dinero es el que no llega a las empresas, independientemente de si han sido mil, dos mil o tres millones de efectos impagados.
En los últimos días, no hago más que escuchar al Gobierno y a los socialistas “que no harían” los populares en estos momentos de crisis. Efectivamente, no se lo que harían, pero seguro que algo sí que harían.