La creación y destrucción de empresas sigue su pulso particular y parece ser que este año la creación va ganando a la destrucción. Se destruyen menos empresas que el mes anterior y se crean más. Se ha destruido un 18,5% menos y se han creado casi un 11% más.
Este dato podría parecer positivo (o muy positivo), pero, de nuevo, “va a ser que no”. Si comparamos los datos de este marzo con los de marzo del año anterior, comprobaremos que los datos son altamente preocupantes. De nuevo, se han disuelto muchas más empresas este marzo que el de hace 12 meses, en concreto un 45,48% más de empresas han echado el cierre, y se han creado un 12,23% menos.
La cifra neta (creadas menos cerradas) es casi un 20% menor, por lo que a día de hoy, hay menos empresas en funcionamiento que hace un año. Menos empresas abiertas implica menos dinero en circulación, menos ventas y compras, más empresas que ya no cobrarán sus deudas, menos recaudación de impuestos y, sobretodo, menos gente trabajando.
Quizá una de las causas sean los 1.730 millones de euros de efectos de comercio impagados, que comentaba ayer. Como vemos, si nos fijamos en datos particulares, todos son malos. Y si los juntamos todos, son peores. Ya llegarán tiempos mejores!!