Me permito la licencia de desviarme un poquito de la temática general de este blog, pero creo que el tener una línea central no quita hablar de temas de actualidad, curiosidades o de “falsas verdades” (como es este caso).
Hablando el otro día con mi amigo Pedro, que el año pasado fue padre por primera vez, me comentó su experiencia con el “a todo bombo” difundido “chequebebé” que nos prometió el Presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero.
La cuestión es que mi amigo Pedro (y su esposa) solicitaron el chequebebé al que tenían derecho, y ahora resulta que les deniegan los 2.500 euros prometidos. ¿Y por qué se lo deniegan? Pues porque mi amigo tuvo “el error” de enamorarse de una chica argentina. Y no sólo eso, sino que se casó con ella. Y no sólo eso, se vinieron a vivir a España. Y no sólo eso, al poco tiempo de estar casados y residentes en Madrid, tuvieron una niña (preciosa, por cierto).
Y el fallo de todo esta historia de amor tan bonita es que cuando la mujer de mi amigo se quedó embarazada y tuvo su hija no llevaba dos años o más residiendo en España. Y ahora sabemos, gracias a mi amigo, que si la madre del bebé (nacido en España) no lleva más de dos años residiendo en España, no tiene derecho a los 2.500 euros del chequebebé. Y es que ahora sé, que los beneficiarios del chequebebé no son los padres (o la unidad familiar), sino la madre. Por lo tanto, da lo mismo quien sea el padre a efectos de cobrar, que sea español, francés, chileno, ruso o malgache… parece ser que para el Gobierno el padre de la criatura no cuenta para nada.
Por tanto, según los requisitos del chequebebé, si la madre es española y el padre es un inmigrante ilegal que entró ayer (o más bien hace nueve meses) en España, da igual, ella seguirá recibiendo su chequebebé, porque la que cuenta es ella, y él no cuenta.
Y si el matrimonio es gay, ellos (o ellas) podrán decidir quien es “la madre” o beneficiario/a, con lo que si uno de los cónyuges es extranjero y residente en España desde hace poco tiempo y el otro cónyuge es español, podrán poner de beneficiario al cónyuge español… y a cobrar.
Por tanto, veo aquí una desigualdad tremenda y una discriminación hacia el hombre español y padre, ya que está claro que con este gobierno tiene más derechos una mujer española que un hombre español, y lo que es más grave, resulta que tiene más derechos un hombre extranjero que un hombre español.
Pienso yo que el que es español es español (sea mujer u hombre) y que el que es padre (utilizo el término genérico) es padre (sea mujer u hombre), y me pregunto por qué en este Estado de este gobierno que se autoproclama tan igualitario es posible que se discrimine por razón de género de una forma tan flagrante. ¿Qué pasa? ¿Qué mi amigo no tiene los mismos derechos que el resto de españoles? Y su hija, ¿es ciudadano español de segunda? La hija de mi amigo tendrá todas las obligaciones de un ciudadano español cuando sea mayor, pero no tendrá todos sus derechos y beneficios, porque en su nacimiento se le denegaron uno de sus primeros derechos, el chequebebé.